Las fuentes con cortina de agua inteligente integran la tecnología IoT y la automatización para crear elementos acuáticos interactivos y responsivos. En el centro de estos sistemas se encuentra un PLC (controlador lógico programable) que procesa entradas de sensores de movimiento, estaciones meteorológicas o interfaces de usuario, ajustando el flujo de agua, la iluminación e incluso el sonido en tiempo real. Los sensores de proximidad pueden dividir la cortina de agua cuando las personas se acercan, mientras que los sensores de luz ambiente modifican la intensidad de los LED (1,000 a 5,000 nits) para una visibilidad óptima. La compatibilidad con control por voz (a través de Alexa o aplicaciones personalizadas) permite la interacción del usuario, y los algoritmos de IA analizan el tráfico peatonal para optimizar los horarios de operación de la fuente. El uso del agua se minimiza mediante sistemas de recirculación (95% de reutilización) y modulación de presión (5 a 20 bar) según la demanda. Las fuentes inteligentes suelen conectarse al BMS del edificio para la gestión energética, con diagnósticos remotos que alertan a los operadores sobre problemas en las bombas o fugas de agua. Estas innovadoras instalaciones transforman fuentes estáticas en experiencias dinámicas e inmersivas para espacios públicos, entornos minoristas o campus corporativos.